05 julio 2006

Los últimos diez años

"Me siento incapaz de resumir en diez líneas estos diez años de literatura. Ni en diez, ni en cien, ni en doscientas; entre otras cosas porque solo he leído una ínfima parte de lo que se ha publicado. Nadie lo ha leído todo. De hecho, lo obvio es que se publica demasiado, lo que significa que las librerías no pueden digerir todo lo que se publica, y que lo malo y lo regular pueden tapar a lo bueno. Esto, supongo, es inevitable. O no. Lo cual me recuerda una idea de Gabriel Zaid que podría formularse así: en lo que a la cultura se refiere, el problema no estriba en toda esa gente que no sabe leer ni escribir, sino en toda esa gente que no quiere leer y no para de escribir. En fin. Lo cierto es que en estos diez años he leído muchos liros buenos y casi ninguno malo, porque hace tiempo que aprendí a abandonar los libros que no me gustan. Algunos de los buenos estaban escritos por gente bastante joven y otros por gente bastante vieja; alguons de los malos estaban escritos por gente joven que cree que la juventud es un valor en literatura y que en consecuencia escribe cosas de viejos, mientras que otros estaban escritos por gente vieja que cree que la madurez es un inconveniente para escribir y que hacía patéticos esfuerzos por parecer joven y que, en consecuencia, también escribía cosas de viejos. He leído libros escritos con el corazón y con las tripas, y no he terminado de leer libros ornamentales o inanes que parecían escritos para gustar, o para que nadie pudiera reprocharles nada. Esto me lleva a pensar que, como no podía ser de otro modo, en estos diez años ha ocurrido más o menos lo mismo de siempre."

(Javier Cercas en el número 111 de Qué Leer - junio 2006. La caricatura es de Loredano.)

6 comentarios:

George Cassiel dijo...

Parabéns. Excelente Blog!

Alicia Liddell dijo...

Le pondremos en la lista de los lectores imperfectos. Me ha gustado su reflexión, especialmente la que comenta solodelibros.

Anónimo dijo...

Lo tuve de profesor de Literatura en la Universidad de Girona a principios de los '90. Hilaba fino ya entonces. Y le pasaba en la línea de lo que una vez dijo Zaid:

"¿Qué demonios importa si uno es culto, está al día o ha leído todos los libros? Lo que importa es cómo se anda, cómo se ve, cómo se actúa después de leer. Si la calle y las nubes y la existencia de los otros tienen algo que decirnos. Si leer nos hace, físicamente, más reales".

Gabriel Zaid

Miguel Sanfeliu dijo...

Cercas es un escritor interesante al que vale la pena seguirle la pista.

Lo cierto es que los libros se han convertido en un fenómeno efímero, en el sentido del poco tiempo que se mantienen en algunas librerías. Un par de meses (y a lo mejor exagero) es suficiente para que un libro resulte difícil de encontrar.

Un saludo, Sfer, siempre es un placer leer tu blog.

Miguel Ángel Muñoz dijo...

Acabo de descubrir tu blog. Ha sido una buena noticia para este día. Te seguiré leyendo. Un saludo.

Anónimo dijo...

Creo que el diagnóstico de Cercas lo podría firmar más de un lector. A mí lo que me disgusta es que en las primeras filas de las librerías siempre estén los mismos best-sellers. Vas a ver puestos el dia de Sant Jordi y los libros no se distinguen entre una y otra parada. Hay gente que piensa que sólo se publican esos libros y va de Los pilares de la tierra al Código Da Vinci y de éste a La Sábana Santa... Y jamás abandona el círculo de los títulos que se encuentran en la primera fila de las estanterías. Triste, muy triste.Y para colmo lee uno al año comprado en Sant Jordi o en Navidades-Reyes.

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